Discover the Surprising Role of the Iconic Spiny Lobster in the Galápagos Ecosystem

Date: Feb. 9th, 2023

//Versión en español abajo.//

Spiny Lobster in its natural habitat © GNPD

The waters of the Galápagos Marine Reserve are home to one of the most famous crustaceans in the Archipelago, the Spiny Lobster. Two species, the Red Spiny Lobster (Panulirus penicillatus) and the Green Lobster (Panulirus gracilis), can be found in Galápagos coral reefs year-round and restaurants during certain months of the year.

These nocturnal, clawless crustaceans are identified by their spiny shells and long, thick antennae. Their bodies are protected by a hard exoskeleton made of a fibrous substance called chitin. Since this natural protective covering does not expand, lobsters must shed their shells, or molt, many times as they grow. Young lobsters molt several times a year, while adults molt only once every year or two.

Lobsters play an important role as keystone predators and purifiers of marine ecosystems, making their conservation critical for the health of other species. Among other services they provide, Spiny Lobsters feed on Sea Urchins. Left unchecked, Sea Urchins can overgraze coral reefs and kelp, the primary food source for Galápagos Marine Iguanas.

However, climate change has affected Spiny Lobster populations, as well as other species,  as sea level and temperature increases threaten the recruitment success and sustainability of the species. Human activities have also caused harm to the coastal marine habitat, whichcombined with overfishinghas led to declines in population size and lobster catches.

The Spiny Lobster is also an important resource for the economy of Galápagos. That is why each year, the Galápagos National Park Directorate (GNPD) evaluates the population status of this resource in the Archipelago to determine appropriate management actions for their capture and supervises the fishing with strict measures in accordance with the fishing calendar set by the environmental authority.

Under favorable conditions, this fishing takes place every year, usually between September and December. During lobster season, visitors to Galápagos can enjoy this local delicacy, capable of surprising even the most demanding palates.

The ecosystems of Galápagos cannot survive without the protection of marine and coastal environments, as many of the Archipelago’s native and endemic species depend on the ocean or its ecological benefits. Galápagos Conservancy and its partner Conservando Galápagos congratulate the GNPD for its decades of hard work protecting the valuable marine resources of Galápagos.

Spiny Lobster © GNPD

La langosta espinosa , un recurso valioso del Archipiélago de Galápagos

Las aguas de la Reserva Marina de Galápagos son el hogar de uno de los crustáceos más emblemáticos y famosos del Archipiélago, la langosta espinosa, de la cual existen dos especies: la langosta espinosa roja (Panulirus penicillatus) y la verde (Panulirus gracilis).

Estos crustáceos nocturnos, sin tenazas, viven en los arrecifes coralinos, y se los identifica por sus largas patas. Su cuerpo está protegido por un exoesqueleto duro y resistente de quitina que protege al animal, pero esta protección natural no crece, por lo que debe ser descartado muchas veces a medida que el animal se desarrolla, por lo tanto las langostas mudan su caparazón periódicamente al crecer. Se conoce que las langostas jóvenes mudan varias veces al año, pero las más grandes lo hacen con menos frecuencia.

Las langostas son importantes para la salud de los ecosistemas marinos debido a su rol de organismos purificadores, de ahí la importancia de conservarlas. Sin embargo, el cambio climático ha afectado, al igual que a otras especies,  a las poblaciones de langosta espinosa, pues los incrementos del nivel del mar y de la temperatura, amenazan el futuro de esta especie.  

La langosta espinosa además es un recurso importante para la economía en Galápagos, por ello, en el Archipiélago, todos los años la Dirección del Parque Nacional Galápagos (DPNG) evalúa el estado poblacional de este recurso para establecer acciones de manejo adecuadas para su conservación, y supervisa la pesquería con estrictas medidas de acuerdo a un calendario pesquero definido por la autoridad ambiental.

Cuando la evaluación poblacional muestra buenas condiciones, se autoriza un período de pesca bajo limitaciones de talla y volumen de captura, usualmente entre septiembre y diciembre, los visitantes a Galápagos podrán degustar este plato típico, capaz de sorprender a los paladares más exigentes.

Los ecosistemas de Galápagos no pueden sobrevivir sin la protección de los ambientes marinos y costeros, pues muchas especies nativas y endémicas del Archipiélago dependen del mar o de los procesos ecológicos que tienen relación directa con el océano. Por lo tanto, Galápagos Conservancy y su filial Conservando Galápagos, felicitan a la DPNG por sus décadas de esfuerzo enfocado a la protección de los recursos del mar de Galápagos.