Gálapagos Conservancy Boosts Organic Production in the Enchanted Islands

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Cecilia Guerreero working on growing food organically in Santa Cruz. © Galápagos Conservancy

The advantages of sustainable agriculture are widely known throughout the world. In Galápagos, more and more farmers are striving to cultivate the land responsibly and produce quality food in ways that do not damage the environment.

One of them is Cecilia Guerrero of Santa Cruz Island, one of the beneficiaries of Galápagos Conservancy’s Women in Sustainable Entrepreneurship (WISE) Program grants with initiatives that promote sustainability in the Archipelago.

In places like the Galápagos Islands, organically growing food becomes even more critical because, in addition to offering products that benefit human health, organic production significantly reduces environmental damage, especially to the farmland.

With the support of Galápagos Conservancy, Cecilia is working on the use of organic waste generated on her farm to develop different types of organic fertilizers. She is strengthening the knowledge of the staff working on her farm and other farmers on Santa Cruz Island regarding agro-ecological crop management.

“We farmers want to have a profitable production, but it must not only be profitable in economic terms,” Cecilia emphasized. “We must also ensure that it is profitable and beneficial for human health and of the environment.”

For Galápagos Conservancy it is vital to promote and support organic production in the Archipelago, because the remains of chemical products and pesticides are dispersed in the environment and become contaminants for animals, plants, soil, air, and water, threatening their stability and representing a danger to public health and the fragile ecosystems of the Galápagos Islands.

Cosecha de cultivos orgánicos. © Galápagos Conservancy

Galápagos Conservancy impulsa producción orgánica en las Islas Encantadas

Las ventajas de la agricultura sostenible son ampliamente conocidas en todo el mundo y en las islas Galápagos cada vez son más los agricultores que se esfuerzan por cultivar la tierra con responsabilidad con la finalidad de tener productos de calidad que no afecten ni dañen el ambiente.

Una de ellas es Cecilia Guerrero, quien vive en la isla Santa Cruz y es una de las beneficiarias de las subvenciones de Galápagos Conservancy para mujeres emprendedoras con iniciativas que promueven la sostenibilidad en el archipiélago.

Cosecha de tomate orgánicos. © Galápagos Conservancy

En lugares como las islas Galápagos cultivar los alimentos de manera orgánica se vuelve aún más importante, pues además de ofrecer productos que traen beneficios para la salud del ser humano, la producción orgánica contribuye a detener significativamente daños al ambiente, especialmente a la tierra de cultivo.

Con el apoyo de Galápagos Conservancy, Cecilia trabaja en el aprovechamiento de los residuos orgánicos que se generan en su finca a través de la elaboración de distintos tipos de abonos orgánicos. También, fortalecerá los conocimientos del personal que trabaja en su finca y de otros agricultores de la isla Santa Cruz respecto al manejo agro-ecológico de cultivos.

Cecilia se esfuerza por hacer cultivos orgánicos y hace su propio compost, “los agricultores queremos tener una producción rentable, pero no solo debe ser rentable en términos económicos sino que debemos asegurarnos de que sea una producción rentable y beneficiosa para la salud del ser humano y del ambiente”, enfatizó.

Para Galápagos Conservancy es importante promover y respaldar la producción orgánica en el archipiélago, pues los restos de productos químicos y pesticidas se dispersan en el ambiente y se convierten en contaminantes para animales, plantas, suelo, aire y agua, amenazando su estabilidad y representando un peligro para salud pública y para los frágiles ecosistemas de las islas Galápagos.